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CIRBE: qué es y cómo influye al solicitar préstamos

En España, los bancos cuentan con varias herramientas para evaluar la fiabilidad de los solicitantes y determinar el riesgo de impago. Una de las más importantes es la CIRBE, que está estrechamente relacionada con la concesión de préstamos, ya que funciona como una central de información financiera.

La CIRBE es gestionada directamente por el Banco de España, lo que le otorga gran credibilidad y la convierte en un recurso fundamental para las entidades financieras al evaluar una solicitud de préstamo. En este artículo, te explicaremos todo lo que necesitas saber sobre la CIRBE y qué hacer si apareces en sus registros.

Antes de profundizar en la relación entre la CIRBE y los préstamos, es fundamental entender qué es la CIRBE. La Central de Información de Riesgos del Banco de España es una plataforma digital donde se registran datos sobre usuarios que representan un riesgo financiero.

Es importante destacar que la CIRBE recopila información tanto de personas físicas como de personas jurídicas, abarcando todo tipo de operaciones financieras, ya sean en empresas privadas o públicas.

En la CIRBE se pueden encontrar datos relacionados con una amplia variedad de productos financieros, como hipotecas, líneas de crédito para empresas y préstamos personales.

Diferencias entre CIRBE, ASNEF y RAI

Una de las dudas más comunes al hablar de la CIRBE y los préstamos es si esta central funciona como una lista de morosidad, tal como ASNEF o RAI. La respuesta es no.

ASNEF es un fichero que recoge deudas de personas físicas relacionadas con préstamos, servicios y otras operaciones financieras. Para aparecer en este registro, la deuda debe ser igual o superior a 50 euros.

Por su parte, RAI es un registro que agrupa impagos de personas jurídicas con importes mayores a 300 euros. Para estar en RAI, la deuda debe provenir de pagarés, cheques u otras transacciones comerciales impagadas.

En cuanto a la CIRBE, esta no solo incluye a quienes tienen impagos, sino también a quienes han contratado préstamos, hipotecas o actúan como avalistas. Es decir, si nunca has tenido un préstamo, hipoteca o no has sido avalista, no aparecerás en la CIRBE.

Cualquier obligación financiera contraída con un banco en España se registra en la CIRBE, pero no los impagos de servicios. Sin embargo, en casos graves de morosidad, podrías aparecer también en esta central.


¿Qué información recoge la CIRBE?

Desde 2021, cuando una persona entra en la CIRBE, forma parte de dos informes:

  • Informe detallado: Muestra todas las transacciones financieras notificadas por las entidades, siempre que la cuantía sea igual o superior a 1.000 euros. Incluye datos como el código de la entidad financiera y el código de identificación.
  • Informe agregado: No detalla la entidad declarante, sino el importe total de ítems similares (por ejemplo, plazos y garantías). Solo incluye riesgos mayores a 1.000 euros.

CIRBE y préstamos: ¿cómo influye?

La relación entre la CIRBE y los préstamos puede complicar la obtención de financiación. Los bancos revisan esta central para evaluar tu riesgo crediticio y, si apareces en la CIRBE con altas obligaciones, podrían rechazar tu solicitud para evitar un posible impago.

Por ello, es fundamental buscar soluciones para reducir o saldar tus deudas y así mejorar tu perfil financiero antes de solicitar un préstamo.


Productos financieros registrados en la CIRBE

La CIRBE recopila información de personas físicas y jurídicas sobre:

  • Hipotecas.
  • Préstamos personales.
  • Factoring.
  • Tarjetas de crédito.

Deuda mínima para aparecer en la CIRBE

Para que tu nombre figure en la CIRBE, debes tener una deuda acumulada superior a 9.000 euros, ya sea con un solo banco o sumando varios.


¿Tienes deudas altas en la CIRBE? Estas son tus opciones

Tener deudas elevadas registradas en la CIRBE puede dificultar la obtención de nuevos préstamos. Por eso, es clave buscar alternativas para saldar esas obligaciones y salir de la central.

Préstamos para salir de RAI:

Si un banco tradicional te cierra la puerta, los préstamos con garantía hipotecaria ofrecidos por empresas de capital privado, como Capital Prestamo, pueden ser la solución. Estas entidades permiten usar tu vivienda como garantía, facilitando cantidades desde 15.000 € hasta 1.000.000 € para ayudarte a salir de RAI rápidamente.

Opción a compra:

Otra alternativa es la opción a compra, un contrato que otorgas a una empresa para que pueda adquirir tu propiedad en un plazo determinado. Esta modalidad te permite obtener dinero inmediato que puedes usar para pagar tus deudas y mejorar tu situación financiera en registros como RAI.

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